Las excavaciones del "Plan B" alcanzaron los talleres donde se encuentran los mineros atrapados hace más de dos meses y se estima que empezarían a salir en dos días.
"No es casualidad que el número de mineros allá abajo sea 33 (32 chilenos y 1 boliviano), la misma cantidad de días que tardamos en realizar las excavaciones y llegar a ellos", fue la palabra del Ministro de Minería chileno que comenzó una improvisada conferencia de prensa para dar la noticia. Es que un tiempo antes el alboroto que se desató en el sector de trabajo, donde los hombres encargados de comandar las perforaciones -durante las 24 horas del día- se fundían en abrazos y se desprendían de algunas lágrimas, anticipaba las buenas nuevas.
622 metros tuvo que realizar la perforadora T-130 para alcanzar los talleres de la mina en los que se encuentra el grupo de trabajadores. Toda la operación tuvo la coparticipación activa de la NASA que, junto al equipo de ingenieros y todo el personal abocado a la tarea de rescate lograron concretar uno de los tres planes que idearon para la situación. Tanto el "Plan A" como el "C" siguen su curso normal por cualquier inconveniente, aunque la mayor parte de la atención estará en el "B".
En las próximas horas se determinará si es necesario reforzar el túnel con hormigón o planchas de acero y se estudiarán las paredes con cámaras de televisión para minimizar los riesgos. Además, será importantísimo el papel de los mineros que deberán preparar la zona de tránsito para la cápsula, la cuál deberán manejar ellos mismos en el ascenso.
En tanto, el grupo de rescate ya preparó el sector aledaño al ducto para que los 33 mineros puedan ser hospitalizados y luego accedan al primer contacto con sus familiares, todo esto por etapas y resguardando la integridad psico-física del grupo.
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