VIOLENTA DEFINICIÓN DEL CAMPEONATO

Argentinos Juniors se consagró campeón del Torneo Argentino de Fútbol y no todo fue alegría en la última fecha.

Tanto Argentinos como Estudiantes llegaban con posibilidad de levantar la copa. Los de La Plata se medían con Colón en Santa Fe, mientras que los de la Paternal iban a Parque Patricios para enfrentar a Huracán. En la cancha, los once jugadores de cada equipo se esmeró por dejar todo y conseguir un resultado positivo, así fue como Estudiantes le ganó a Colón 4 a 1 y sus hinchas dieron rienda suelta a la euforia. Esa que provocó disturbios en la tribuna visitante, donde la parcialidad platense, al enterarse del resultado de Argentinos, comenzó a provocar a la policía y al público local. Por suerte, con la complicidad de los jugadores, Héctor Baldassi logró sofocar la violencia y le dio lugar al reconocimiento para el equipo de Sabella, digno subcampeón que sigue en la pelea por la Copa Libertadores.
Por otro lado, en el encuentro de Huracán y Argentinos, los simpatizantes locales se molestaron al saber, por el resultado 2-1 a favor del equipo de Borghi, que el equipo de La Paternal iba a coronarse en su propia cancha. Allí fue cuando una facción de la popular local comenzó a pelearse con la policía, que se disponía a mantener el orden.

Es lamentable tener que hablar en el desenlace del torneo de estos hechos de violencia, que no llegaron a opacar la consagración de Argentinos, pero dejaran una mancha importante en el Torneo Argentino 2010.