La Fórmula 1 disputó el Gran Premio de China, cuarta presentación del año, y las polémicas llegaron ni bien se puso en marcha la final. En la primera fila se ubicaban los dos autos del equipo Red Bull, con Sebastian Vettel y MarkWebber, y detrás de ellos, del lado externo, Fernando Alonso con su Ferrari.
Cuando el semáforo se puso en verde todas las miradas se centraron en Alonso, que superó con gran facilidad y antes de la primera curva a Vettel y Webber. Esta situación quedó en un segundo plano con el prematuro accidente de Vittantonio Liuzzi, el cual provocó el ingreso del auto de seguridad cuando no se había completado la primera vuelta de carrera. Mientras los auxiliares de pista limpiaban la zona afectada por el percance, los comisarios deportivos analizaron las imágenes de la largada y al momento de relanzarse la competencia, en la cuarta vuelta, se dio a conocer la sanción de un “pase y siga” por boxes para el español, que lideraba hasta ese entonces. Pese a esta sanción y a otros problemas originados por la elección de los neumáticos y la rotura en clasificación del segundo motor en lo que va del año, Alonso pudo arribar en la cuarta posición y seguir arriba en la lucha por el campeonato.
En tanto, el ganador de la competencia fue el campeón reinante Jenson Button, a bordo del McLaren, seguido por su compañero de equipo Lewis Hamilton, y por Nico Rosberg, que una vez mas llevó al podio al equipo Mercedes Benz.
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